Un poema es una obra de poesía con cierta extensión, es una composición literaria que se crea como una expresión artística de la belleza por medio de la palabra. Lo habitual es que este escrito en verso, y puede o no estar sujeto a los recursos poéticos clásicos de la métrica, el ritmo y la rima, aunque también podemos encontrar poemas escritas en prosa.
Teniendo todo esto en cuenta podemos encontrarnos una gran variedad de temas de todo tipo: poemas de amor, de desamor, góticos, eróticos, incluso podemos encontrarnos lo que yo denomino poemas malditos, en los cuales el dolor y la tristeza son el principal fundamento.
Para escribir un poema, lo primordial es tener un sentimiento que queremos expresar, la inspiración puede llegar de muchas maneras, cuando estamos enamorados, enojados, frustrados, tristes, emocionados, devastados, entre otras emociones. Lo importante es desahogar ese sentimiento vaciando lo que sentimos en palabras. Escribir y dejar que todo fluya, lo cual es una herramienta terapéutica que nos ayuda a liberar nuestra mente, ordenar nuestras ideas y hacernos sentir mejor pues suele darle un respiro a nuestra psique.
La mayoría de estos sentimientos no vienen al azar, estos sentimientos y pensamientos llegan cuando una corriente de inspiración nos golpea, pero ¿de dónde proviene esta corriente de inspiración?, la fuerza más grande de inspiración proviene, o en mi caso es principalmente por una musa, ese divino ser que llega para llenar de ilusiones y alegría nuestra vida, o arrebatarnos el alma y dejarnos deambulando como malviviente. Es así como nace el titulo para esta página y para el blog “Musas Letales”.

“Que engorroso es intentar vivir, sin poder eludir la dulzura de ellas…”